5. EL MURO DESCASCARADO de los surrealistas
«En el primero de los Manifiestos del Surrealismo (1924) André Breton sugiere a los pintores momentáneamente faltos de inspiración que miren un muro descascarado: allí verán las más extrañas figuras, su imaginación encontrará un tema, sus fantasmas asomarán la cabeza. "
El manifiesto de Breton está inspirado en el libro de Freud La interpretación de los sueños, en el que el autor explora la idea de que la mente humana posee un nivel oculto llamado inconsciente, es decir aquelo de lo que la mayor parte del tiempo las personas no tienen conciencia, como la palabra lo indica.
El Surrealismo pretendía superar esta limitación del inconsciente, permitiendo que el subconsciente se expresase a través del arte.
De esa forma el automatismo se convirtió en una de las características del Surrealismo, en defensa de la expresión artística sin límites y sin el control de la razón. Para lograr este objetivo, los artistas llegaron a elaborar obras en estados de trance e hipnosis.